Lectura atrapante

Y no han tardado en caer más lecturas. Y más rápido de lo esperado, porque los libros de Stieg Larsson de la serie Millenium, 'Los hombres que no amaban a las mujeres' y 'La chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina', son de esos que uno no puede dejar ni un minuto. La novela negra no es un género que tenga muy controlado y ni sea mi favorito. Pero he de decir que este sueco ha hecho unos libros impresionantes, canónicos del género, en los que la lectura no decae, directos, con unos personajes carismáticos, que uno no se puede plantear si son creibles o no, porque enseguida les tienes símpatia, además el entorno para cualquier europeo del sur es lo suficiente exótico. Las tramas están ben construidas, los macguffin bien puestos, alguna pista se le pilla a la primera, eso si, y a veces se puede ver donde te quiere llevar, pero las más simplemente quieres leer donde. Y es que los dos tochos han caído en un plis, y ya nos ha dejado deseando que salga el tercero y último esta primavera... Lástima que el autor haya muerto y ya no haya un cuarto, aunque hay rumores... Se nota que el autor era un aficionado al género y ha sabido coger lo mejor de cada escuela. Y adaptarlo al siglo XXI, con múltiples referencias a cosas de hoy en día, que no se yo como aguantarán el paso del tiempo, pero no esperén a comprobarlo. Y la otra es como la novela no se centra en los casos, sabe que lo que atrapa son los personajes, y las cosas que pasan en uno tíenen consecuencias en el siguiente. 100% recomendables.