La Mercè 2011

Un nuevo año que pasa y nosotros hemos pasado por las fiestas de la Mercè, más cortas, menos presupuesto, más recortes, y programación ajustada con las nuevas formas del ayuntamiento, y se nota, la pose más que otra cosa, aix.

Empezamos el jueves con la actuación de Pe'z, The Samurai Jazz Band, parte del festival Asia de la casa Asia. Un buen grupo de Jazz de Tokyo, de lo mejorcito de lo visto del BAM este año. Sobretodo el del teclado, vaya ritmo todo el rato.

Y a continuación los Tiki Phantoms, que ya los hemos más de una y más de dos, como van cogiendo fama, aunque presentaban nueva formación, pero bueno el espectáculo de costumbre, con su conga, sus flotadores surf sobre el público, rock surfero marchoso, y salida para antes que cerrasen el metro, por que bien que abra todo el fin de semana, muy bien. Pero alargar una hora el metro para poder volver tras los espectáculos el jueves tampoco habría estado mal, peor como no jugaba el Barça...

El viernes por la tarde más conciertos del BAM, llegamos para el final de Evripidis and his tragedies, que ni fu ni fa, nada, no para mi. Quizás el programa de este año pecaba de independiente (o barato), o yo me hago viejo para según que propuestas, pero estos eran muy noños.

Después, los Za!, puf, muy ecléctico, o mucho ruido y pose rompedora, pero luego diría que nada más allá que llegarlo a los talones a Zappa (ni de lejos), o imitar al Pau Riba de los 70, eso si, con samplers en vivo. Pesaditos para lo que esperabamos, así que retirada cervecera.

Para volver un poco más tarde para los que prometían ser el plato fuerte de lo indie, los Wu Lyf, pero vamos que entre el sonido de caca al que estamos acostumbrados por estos lares, o que en directo ya en si mismo suenan uniformes y gritones, no nos convencieron para nada, y es más nos hicieron desistir del BAM de este año. Se lo dejamos a nuevas generaciones.

Y acabamos a codazos en la plaça Sant Jaume, a ver el final de la gira de los Pinker Tones, y he de decir que estos si que ganan bastante en directo, sus discos me pasaron más o menos así asá, bien pero... En directo ganan enteros, en su vertiente más rockera, y interactuando con el público, más guiris que otra cosa, en actitud pesada o muy pesada, porque no saben lo que son las fiestas, en fin lástima. Pero la música muy bien, y el final totalmente electrónico genial. Y con esto y con pocas ganas de esquivar más guiris nos retiramos el segundo día.

El plan era levantarse pronto el sábado para ver cosas tradicionales. La lluvia se encargo de cambiar los planes, como de costumbre para la Mercè, así que nada por la mañana, día gris, lluvia, y actos anulados (pero se pagan igual?) Ya por la tarde parecía que iba la cosa a aguantar, así que nos acercamos a la Ciutadella, a ver alguno de los espectáculos de carrer que se hacían por allí, bandas de calle, malabarismos suizo-americanos. Y después irnos a ver la cavalcada con los gigantes, y ver unos cuantos, las tradiciones son las tradiciones.

Y después periplo para llegar a la fábrica Damm, cada vez más un clásico de las fiestas, con el concierto delante de la fábrica, no llegamos para ver los que no son Manel pero suenan a Manel, y directamente fuimos a ver a Herman Dune, bueno, ya los habíamos visto hace dos años en un primavera, y ni me acordaba, así me llegó el rollito, música amable, y bien para estar ahí de fondo, mientrás te tomas unas cervecitas traídas de la fábrica bien ricas y a buen precio, y acompañarlas de la butifarra y la camiseta de turno.

Y después antes de que empezase Mando Diao de nuevo se puso a diluviar, un rato bajo los balcones, y como estos no nos llamaban, a un bar a refugiarse, tomar algo y ver un poco del Barça Atlético. Y luego para la plaça Reial a ver al Grupo de expertos Solynieve, que son como una extensión de los Planetas, y por tanto tiene todo su público, y no puedes decir nada, que si no pareces un antimoderno. Pero su rojo como un pimiento me puede, no puedo con esa poética consonante fuerza rima a lo Pau Donés, que puede ser poesía y no entenderlo, pero miento, y sino rojo como un pimiento. Y fin para le sábado, gente para el Fórum y otros para la cama, a ver si el domingo hacía sol y podíamos aprovechar.

Y el domingo hizo sol, y aprovechamos, y nos fuimos para la plaça Sant Jaume a ver los Castellers, y los de Vilafranca lo bordaron, una de las mejores actuaciones que se han visto en la plaza, con un 3 de 9 an folre i agulla espectacular y una torre de 9 amb folre i manelles que también. Los minyons de Terrassa tampoco lo hicieron nada mal, y aguantaron bien una caída, y los de Barcelona más que dignos, lástima que falte gente ante la aparición de tantas collas en la ciudad, que no pudieron actuar todas el sábado, una lástima.

Y tras los castellers, ya tarde, bocata, y a la Ciutadella, a ver otros espectáculos de carrer, Demos Bros, el aburrido carrillón un rato. Y después ya cansado, epro no tanto como Bob, al que le parece le sienta mal tanta fiesta, nos fuímos para el correfoc.

Tomamos una cervecira para recuperar ph y nos acercamos a ver el correfoc infantil, que tiene su gracía, y menos gente para poder acercarse.

Luego el correfoc grande ya es cosa sería, se pone la Via Laietana a petar, se monta el espectáculo de la porta de l'Infern, que con tanta gente se alarga un poco, peor luego no esta mal los fuegos, y luego fuego y más fuego, aún nos metimos demasiado cerca para lo poco preparado que íbamos, pero uno a poco que ve la chispa y huele la pólvora poco puede resistirse. Aunque tampoco pudimos estar todo lo que queríamos, que este año otra cosa no, pero solapados los horarios para tener que ir haciendo elecciones constantemente las que quieras.

Y había que acabar con el piromusical como cada año, este año dedicado a las cuatro columnas, que les proyectaban cosas con láseres, pero con el humo de los fuegos no se veía. Este año los fuegos bastante bien, muy vistosos, y como de costumbre lo peor la música, aunque este año parecía simplemente aleatoria para seguir los fuegos, con lo que algo se gana respecto los intentos temáticos de otros años, y como de costumbre las tristísimas versiones forzadas en catalán de algún clásico, que no hacen falta sino es por una cuestión de cuotas, bien Serrat, bien els Pets, pero una versión petarda de no se sabe quién del I will Survive por un Sobreviure, o Sobreviré, no pega. Y se nota la crisis, los paquetes de bengalas solo en pocos sitios, y daban un paquete sin personalizar con diez bengalas para repartir, y un mechero de propaganda que no va.

Y con este y un bizcocho hasta la próxima, a ver si no cae en Sábado y se alarga un poquito más, aunque al final al llegar a casa ya estás bastante reventado.