26 mayo 2018

Con los codos pegados al torso

Con los codos pegados al torso, una entrevista de Kike Infame a Mauro Entrialgo. Kike Infame, hace cómics, y también los crítica, divulga, promociona, y hace actualmente de las mejores entrevistas en torno al mundo del cómic que se pueden leer. Esta es un ejemplo, un librito con una extensa entrevista a Mauro Entrialgo, un dibujante entre otras muchas cosas, con un gran bagaje en esto de las historietas, con una cabeza muy bien amueblada y del que saber su opinión siempre está más que bien. Así que este libro de entrevista se lee con interés, para conocer a Entrialgo y sus variadas vertientes artísticas, un autor que curiosamente no tengo muy leído, de esos casos en que aunque su trabajo me gusta, me parece más interesante como persona. Así que el libro es interesante, y ciertamente dan ganas de leer algo más de Mauro. Una valiente apuesta, como de costumbre, la de Autsaider al publicar estás cositas, con el cariño habitual. Solo se echa en falta un listado bibliográfico con la obra de Entrialgo al final del libro.

25 mayo 2018

Soppy

Soppy de Philippa Rice por fin ha llegado a estos lares. Cuatro notas sobre este tebeo:
  • Conocí el trabajo de Philippa Rice a través de una charla de Paul Gravett, un maestro en esto de hablar de tebeos y transmitir pasión.
  • Lo primero que leí fueron las tiras de My cardboard Life, una maravilla de humor sencillo realizado con collages y mucho ingenio, vale la pena perder unas horas surfeando su web.
  • Las aventuras de esta adorable pequeña caja de cartón también se pueden encontrar en papel, autoeditadas por ella misma. Tengo algún libro y siguen siendo una pequeña maravilla.
  • Poco tiempo después, en 2014, sacó este Soppy, un pequeño tebeo que publicó con editorial grande, y que se convirtió en todo un éxito de ventas con múltiples traducciones. E incluso productos derivados, como un pequeño diario para hacer tu propio Soppy.
  • Con un dibujo muy simple, medio basado en manga medio basado en los dibujos animados, y con solo tonos negros y rojos recoge pequeños momentos llenos de ternura en los que presenta escenas del periodo de enamoramiento con Luke.
  • Tiene mucho de autobiográfico, su actual pareja, entrando en la salsa rosa, es Luke Pearson, creador de Hilda. Con el que ya han tenido descendencia, lo que le ha mantenido un poco alejada de los cómics.
  • No solo cómics, también hace animaciones, y muñecos de Crochet, todo talento.
  • Soppy, es tierno, dulce, bobo y empalagoso. Una delicia. Todo un caramelo, con solo esas cosas sencillas que hacen que uno se enamore de una persona. Cosas cotidianas que permiten a cualquier lector verse identificado en algún momento. 
  •  Y esa es la virtud de Rice, ser capaz de coger todos esos momentos, que pueden pasar desapercibidos en el día a día, pero que todos juntos dan una nueva mirada y explican porque la gente se enamora.
  • Philippa Rice es de esas personas que sin necesidad de conocerlas achucharías muy fuerte. Transmite una ternura infinita.
  • Al fin llega traducida de la mano de la Cúpula y de Brúfalo, una pequeña editorial infantil con la que unen esfuerzos y sinergias para empezar una nueva línea editorial para todos los públicos. Con tebeos como este la cosa promete.
  • Y para septiembre ya esta anunciado un nuevo tebeo de Rice, contando anécdotas junto a su hermana, con un toque de humor más cabrón. Y la cosa tiene muy buena pinta.


(Aquí estamos, probando una nueva aproximación a como reseñar tebeos, a ver que sus parece.)

23 mayo 2018

Del boom al crack

Del boom al crack. La explosión del cómic adulto en España (1977-1995) coordinado por Gerardo Vilches, un libro de ensayos y entrevistas con textos de Daniel Ausente, Jordi Riera, Pepo Pérez, Roser Messa, Rubén Lardín,
Roberto Bartual, Álvaro Pons, Octavio Beares, Marika Vila,
Julio Andrés Gracia Lana y el propio Gerardo Vilches en la introducción. Con entrevistas a Emilio Bernárdez, editor de la Cúpula, Rafael Martínez, fundador de Norma y a Miquelanxo Prado. Todo un repaso a lo que fue el panorama de la revista de cómic para adultos de finales de los 70 y que acabó desapareciendo a mediados de los 90 del siglo pasado, dejando un panorama para el cómic nacional muy tocado. Empieza con un repaso a los cómic de agencia que se producían en serie antes de que explotase del todo la conciencia y el reconocimiento autoral, para luego hablar de la escena underground, principalmente en Barcelona, que fue el epicentro de la edición de las revistas de los 80. Pasando por perfiles de autores como Enric Sió o Carlos Gimenez, como referencia de la época, y tocando temas como la presencia de las mujeres en aquella explosión, o cual fue el destino de tantos autores tras el crash. Un libro que se lee de forma muy amena, y que sirve perfectamente para conocer el tebeo que marco una época y quedo marcado como una excepción en nuestro mercado. Se centra en ese tipo de revistas de cómic de género para público más adulto, sin entrar en otros aspectos como el cómic infantil, que también tuvo su declive por esas fechas, y solo de forma muy tangencial el de las revistas de humor satírico de la transición. Así que hay tema para rato en torno a los tebeos y los cambios que hubo en ese período. Quizás fuera del alcance de este libro, que a pesar de la coralidad de los autores, que se nota en las diferentes voces y acercamientos a los distintos temas, la coordinación hace que el libro sea del todo consistente, guardando un orden coherente y dando la idea de un todo bien cohesionado, muestra de una buena planificación. Quizás he echado en falta solo puntualmente un poco más de contextualización socioeconómica de la época en torno al fenómeno, que quizás diera más luz a los sucesos en función de lo que iba pasando en una sociedad que estaba cambiando mucho y muy rápido. Esperemos que tenga continuación, y que alguien explique como sobrevivieron los tebeos desde el crack de las revistas hasta la llegada de las novelas gráficas. Sigue habiendo mucha tela para hablar de tebeos. Si se hacen con libros así, son historias seguro que muy disfrutables.

16 mayo 2018

Adults in the room

Adults in the Room. My battle with Europe's deep establshment de Yanis Varoufakis. La crónica de una derrota, una tragedia griega con todas las de la ley. Varoufakis explica en este libro su paso como ministro de economía del gobierno de Syriza y como fracasó en su intento de negociar una salida de la crisis griega con la troika todo poderosa. Y es bastante cabreante todo ello, sorprende la incompetencia, incapacidad y cinismo de los responsables políticos de todo el tinglado, que quedan dibujados por Varoufakis como simples títeres de poderes económicos solo preocupados por mantener su poder y status. Todo lo demás, ya tal, no importa, así que a ese único interés le sumamos una suma incompetencia, y da como resultado una maldad que sufrimos miles de ciudadanos. Cierto es que Varoufakis da su versión del cuento, y para empezar no es que tenga poco ego, así que se hace poseedor de unas razones poderosas y mucho de salvador y tal. Pero eso no quita que lo que proponía fuese del todo razonable, incluso dentro de los parámetros neoliberales, y que lo que relata de políticos y altos funcionarios sea para estar como poco preocupado, y si de algo sirviese, quemando cosas por la calle. El libro se lee con interés, parece mentira pero todo el tema tiene un ritmo trepidante, y uno se da cuenta de lo poco democráticas en lo que se han convertido las estructuras de la Unión Europea, preocupante. Estructuras que ni siquiera existen en tratados y por tanto no tienen reglas, acojonante. Muy recomendable lectura, que ayuda a entender en que barrizal andamos. Cabrea mucho, y sobretodo ver desnudos a los que nos dirigen, muchos de ellos sin tan siquiera ser escogidos por la gente. Libro muy interesante.

09 abril 2018

12 años


Pues doce años con este rinconcito abierto, hay que reconocer que Google de momento cumple. Como han cambiado las cosas en 12 años de internet, pero que bien seguir contando con este pequeño espacio virtual, aunque sea así, mientras tanto sigo diciendo cosas, por otros sitios y por otras redes. Saben donde encontrarme. Le resistance... el blogs sempre seràn nostres!

05 abril 2018

Humor en serio

Humor en serio. Una antología checa. Un pequeño libro editado por La Fuga que recoge unos cuantos relatos de autores checos de principios del siglo XX. Cuentos de Kafka, Capek, Hasek, Polácek, Hermann, Rakous,  Hrabal y Cech con prologo de Stanislaw Skoda. Curioso recopilatorio con el sentido del humor centroeuropeo, con esa peculiar forma de crítica lacónica, algo seco en busca del absurdo de una sociedad que está llena de conflictos de todo tipo, bélicos, sociales, religiosos. Estos autores supieron verle la parte absurda y sacarle punta para hacer la siempre necesaria crítica. Y ve en ellos muchos reflejos de la situación actual, cosa que congela la sonrisa tras la lectura, en pensar que tras el chiste estuvo la tragedia a la que parece vamos de nuevo de cabeza. Es importante recordar el pasado, y reírse de él, para recuperar la sonrisa en el presente. Que bueno que haya editoriales que vean la importancia de la risa y apuesten por el humor.

28 marzo 2018

Cómic, arquitectura narrativa

Cómic, arquitectura narrativa de Enrique Bordes. Un ensayo académico que deriva de la tesis del autor, y en el que explora la forma en el que se utiliza el espacio para explicar historias en el cómic. Desde el origen del hombre este ha expresado cosas a partir del dibujo primero y de la palabra después. Unidas enseguida tuvieron una intención narrativa, que Bordes explora desde el punto de vista de su disposición y su relación con el espacio. Y lo hace profundamente, desde los orígenes de tablillas egipcias, pasando por la columna de Trajano, y los códices medievales, hasta llegar al meollo de la cuestión, que el el cómic como el gran arte narrativo, que une dibujo y palabra, y ha desarrollado y evolucionado para expresar espacios y tiempo en representaciones bidimensionales, una historia del cómic que pasa por McCay, Swarte, Herrimann, Ware y tantos otros. Y la relación que hay entre esas vías y las de la arquitectura. Un libro muy documentado y riguroso, lleno de referencias gráficas que se agradecen para poder ver todo lo que Bordes explica, incluso en una guía final con muchos ejemplos de recursos de esa relación entre la arquitectura y el cómic, y como se puede retorcer el espacio en un medio joven y que tiene mucho por decir, y que en este siglo está volviendo a tener consciencia sobre su versatilidad y todas las posibilidades que tiene. He disfrutado como un enano leyendo este ensayo, con el que se aprenden un montón de cosas y te da un nuevo punto de vista a la hora de leer tebeos.

27 marzo 2018

La crisis de los cuarenta

La crisis de los cuarenta por J.A. Hazeley y J.P. Morris, un pequeño libro en la estela de los libros infantiles añejos, en los que se presentan pequeños textos humorísticos en torno a diferentes personajes en plena crisis de los cuarenta y las tópicas locuras que se realizan a esas edades, todo acompañado por ilustraciones añejas de los cuentos de los que hacen homenaje que acompañan a los textos con una nueva función descontextualizada. Un cuento con moraleja para adultos con un humor en la línea del Mundo Today, que dura lo que un cuento y con la que te rías mientras te va clavando espinitas. Un divertido regalo.

22 marzo 2018

Walkaway

Walkaway de Cory Doctorow. El último libro de ficción de Doctorow, que sigue en su línea de ciencia ficción de futuro próximo con mucha carga política. En esta ocasión el escenario planteado es un futuro donde el capitalismo está ya al borde del colapso, cuando los cuatro que tienen el pastel prácticamente lo tienen ya todo, son los zottas, ya más allá de gigamillonarios. En ese escenario distópico Doctorow saca su vena optimista y plantea una utopía anarquista con la gente que abandona el sistema y crea una nueva forma de interacción socioeconómica, basada en compartir y en el prestigio social de ese acto, en un futuro donde hay recursos de sobras gracias a las nuevas técnicas de producción, siempre que uno escape al control capitalista. El libro empieza presentando las communist parties, fiestas que ocupan una fábrica y en una rave las ponen a producir para regalar las cosas, la utopía anarquista del común, ya sigue avanzando sin parar, presentando a los que abandonan el sistema organizadamente y son disruptivos al conseguir un hito tecnológico que da un giro y cambia el equilibrio de todo, lo que obliga a la respuesta zotta violenta, con la clara persecución y ataques a los walkaway anarquistas. Como siempre lleno de ideas izquierdosas, una visión progresista muy del otro lado del charco, y donde se nota que extrapola de eventos como el Burning Man. Muchas propuestas son más que plausibles, aunque claro hay algunos puntos que no toca, pero eh, esto es ciencia ficción y no un ensayo, así que es para pensar sobre ello, y como de costumbre muchas de las ideas que presenta son más que interesantes y seguro avanzan cosas que podríamos ver en unos años, no sé si en la parte mala o en la parte buena. Por otro lado a pesar de los planteamientos, los personajes y la trama cojean un poco, como de costumbre, el escenario y las ideas pesan más, y eso hace que el resultado final no sea redondo y se haga un poco tedioso seguir las aventuras de unos protagonistas con los que cuesta empatizar totalmente, con unas relaciones personales que pueden chocar vistas en según que públicos, pero que por estos lares no son ninguna sorpresa (siendo progresista, claro), y solo normalidad que no aporta a la historia. Cuando Doctorow se pone adulto es menos efectivo que en sus novelas para un público más amplio, pero aún así solo por la cantidad de ideas y por ver algo de descarada ideología de izquierdas en la CF, casi en la línea de la vieja CF soviética, ya vale mucho la pena.

09 marzo 2018

Calcetines de birras

Los calcetines viudos se van de cervezas. #Zizza!

21 febrero 2018

Aniquilación

Aniquilación de Jeff VanderMeer, primera novela de la trilogía Southern Reach. Una novela cortita, que parece más el prólogo a una historia que otra cosa. Cuatro mujeres se adentran en un paisaje selvático misterioso, y ven cosas raras, les pasan cosas raras, y al final no se sabe muy bien que ha pasado, pero que todo es muy misterios. Y chimpún. Si te ha pillado la ambientación pues sigues con la trilogía, y sino pues como haré yo, ya veremos cuando continuamos, porque todo ese paisaje de sucesos extraños nos ha dejado más bien fríos. Que sí, que también hay un que de viaje interior de introspección y de reflexión sobre lo que significa ser o no parte de una sociedad, y de la soledad, y tal, pero que para que. Si cuando lees eres de los que pintan el cuadro en la cabeza, funcionará mejor, que si eres de los de que hablen y pasen cosas.

20 febrero 2018

Kirinyaga

Kirinyyaga de Mike Resnick, un libro hecho a base de recopilar relatos basados en un mismo universo y que al final construyen una historia más grande. Muchos relatos con muchos premios dentro del género, pero que muestran que difícil es esto de la ficción, porque a mi el libro en si no me ha gustado, y más bien me he aburrido. EL planteamiento es muy maniqueo, se supone un grupo de fanáticos quieren vivir en un planeta propio sin la influencia europea, tal como era su tribu africana ancestralmente. Un planteamiento que escribe un americano blanco, y pone como protagonista un intransigente y fanático líder para las tribus. El mismo se tiene que justificar que obviamente su pensamiento no es el del fanático. Pero es que tampoco funciona como yuxtaposición, ya que todo es como muy blanco o negro. Vamos no me ha convencido para nada, ni la utopía de los kikuyus, ni la de los masais, que eligen un líder blanco más preparado (o_o) y modernizarse a lo europeo. Como si no hubiese ni alternativas a un lado y a otro. En fin, que como el planteamiento no me ha funcionado, todo el castillo de la ficción se ha caído a trozos y me he tragado un libro que me ha aburrido en busca de algún giro en alguna historia que no ha llegado.

27 diciembre 2017

Algunos tebeos del '17

Se acaba el año, y como ya es tradición eso quiere decir que llega el momento de mi lista de lecturas de tebeos destacadas durante el 2017. De nuevo este año hemos estado alrededor de los 200 tebeos leídos, que son unos cuántos, pero que apenas llegarán como mucho a ser un 10% de lo publicado. En lo que respecta al mercado pocas variaciones a lo que viene sucediendo estos últimos años, y las sensaciones se repiten y podría copiar prácticamente la introducción de la lista del 2016. El mercado sigue muy fragmentado, con muchos nichos especializados, con sus tiradas limitadas, y hay más salud en la variedad que en la cantidad que un tebeo puede vender. Este verano el País hablaba de una edad de oro del cómic español, y probablemente no sea para tanto y todavía falta perspectiva para analizarlo. Lo que si que queda bien definido es el tebeo mainstream que se ha generado entorno al boom de la novela gráfica y la presencia de los tebeos en las librerías generalistas. A parte de eso, se publica mucha cosa y muy variada, lo que hace que el lector se tenga que centrar más en un nicho específico y hace años que muy lejos queda el lector omnívoro que podía con todas las novedades. Ante un mercado amplio en oferta y muy dividido en compradores los tebeos que se publican tienen que tener, si quieren sobrevivir, un mínimo de calidad muy alto, lo que hace que la calidad artística del mercado sea elevada, y haya muchos buenos tebeos donde escoger. Por otro lado se hace difícil seleccionar unas pocas obras que destaquen muy por encima de las demás, nos hemos acostumbrado a leer muy buenos tebeos, y a parte del hype promocional de las redes, es difícil encontrar obras maestras por unanimidad.

Este hecho se nota por ejemplo en las listas de lo mejor del año que ya han ido apareciendo, algunos títulos coinciden en muchas, pero destaca más el hecho de la diversidad de tebeos que se pueden encontrar en ellas, dependiendo de donde aparezcan y a que público estén dirigidas. Una variedad muy saludable para los tebeos si estuviese acompañada por una multiplicación del número total de lectores. Sin esos lectores añadidos veremos la sostenibilidad a la larga de todo el montaje, ya se nota mucha cautela en las editoriales.

De momento disfrutemos de los tebeos leídos, que como verán en mi caso también se ha centrado en lo que son mis gustos, y estos ya se pueden seguir las huellas de los años que he ido sacando la lista. Dos novedades de este año; cada vez más pillado en las lecturas, este año directamente hago la lista sin haber podido acabar toda la pila de lecturas, y las que se esperan en la librería. Además el mercado navideño alimenta las novedades de última hora, que ya pueden ser obras maestras, pero tienen un mal timing para entrar en listas. La otra es que alrededor de un 15% de lo leído ha ido apareciendo en forma de reseña en 13 millones de naves.

Y el resto como cada año, lista numerada pero sin clasificación, 10 títulos de autores nacionales, ya sea para una producción interna o para importarla más tarde. Otros 10 títulos de procedencia europea, y dejamos 5 para los americanos (o del resto del mundo) y 5 para los mangas. Como siempre la lista es totalmente subjetiva (obvio), se basa en mis lecturas, y se ha leído lo que se ha podido. Naturalmente en función de mis gustos y filias.

# Nacional

Vamos con el cómic de autores de aquí, en el que siguen apareciendo muy buenos tebeos, a la que se van añadiendo nuevos autores a los ya consolidados, ya tenemos la generación pre novela gráfica, los novela gráfica y los post. Y a estos ya le pisan los talones otra nueva remesa de jóvenes autores, cuyas referencias ya son propiamente de este siglo, ya sea para romperlas o para tomarlas de base. Otra cosa es las expectativas de consolidación en el mercado.



  1. Pinturas de Guerra de Ángel de la Calle. Vaya relato duro, complejo e inteligente construye Ángel de la Calle ante el exilio y la supervivencia de los ideales en torno a un grupo de artistas que han tenido que escapar de las dictaduras sudamericanas. Carne de premios.

  2. La deuda de Martín Romero. Hacía tiempo que esperábamos un nuevo trabajo largo de Martín Romero, de nuevo en su blanco y negro, con influencias de los Hernández y de Tatsumi que lleva a su terreno para explicar la historia de una caída de un perdedor, con mucha crítica social de fondo.

  3. Cosmonauta de Pep Brocal. La última esperanza de la humanidad es un cosmonauta que vaga por el espacio, y en su viaje reflexiona sobre eso pequeños hechos cotidianos que le dan sentido a la vida, a los que Pep les busca una respuesta usando un fino humor.

  4. Disparen al humorista de Dario Adanti. Complicados tiempos estos que corren en los que hay que explicar lo que es el humor y su función y defenderlo ante los ataques que están minando la libertad de expresión. Menos mal que gente como Adanti lo explica bien clarito, el humor y su necesidad como primera defensa a través del propio humor.

  5. Cortázar de Jesús Marchamalo y Marc Torices. Una biografía de este escritor universal, que Marchamalo centra en aquellos hechos vitales que van a definir la obra del autor más que en seguir una cronología al uso. Torices coge este encargo y gracias a su arte lo lleva a otros niveles simbólicos.

  6. Febrero para galgos de Peter Jojaio. Duro y violento retrato de un adolescente viviendo en el lado más oscuro de la sociedad, un reflejo de nuestros defectos, una obra donde Jojaio experimente con distintos elementos gráficos y todos encajan en la historia que quieren contar.

  7. Carlitos Fax de Albert Monteys. La recuperación de este cómic para todas las edades de Albert Monteys donde tomando la fórmula clásica del tebeo de Bruguera da lecciones de humor inteligente y costumbrismo futurista. La semilla para esa otra maravilla que es ¡Universo!, donde recupera el sabor de la ciencia ficción más clásica. Y que le ha abierto la puerta americana para hacer Solid State, su trabajo más largo hasta el momento y una maravilla gráfica. Y espero no se hayan perdido esa maravilla del humor que es Funny Pages.

  8. La Balada del norte 2 de Alfonso Zapico. La continuación de la historia en torno a la revolución de los mineros en Asturias antes de la guerra Civil, un relato que Zapico borda con su característico estilo suelto y con mucha carga ideológica, recuperando esos trozos de historia que marcan acontecimientos y no deben caer en el olvido.

  9. Un millón de años de David Sánchez. Otro ejemplo del universo perturbador de Sánchez, que con su línea clara crea universos bizarros, en esta ocasión juntando una serie de historias cortas que reflexionan en torno a la paternidad y la divinidad. Y si hubiese poca dosis también está Museomaquia junto a Santiago García o como crear una historia en torno a las interpretaciones del arte usando protagonistas de distintos cuadros del Thyssen.

  10. Don Talarico el Castillo encantado de Jan. Si no era suficiente con poder seguir disfrutando de tres álbumes de Superlópez al año, y de la recuperación de esa delicia que es Pulgarcito, la sorpresa ha sido la recuperación de esta historieta que se daba perdida en manos de la especulación y el desprecio autoral. Pero el empeño de su autor y editor han permitido redibujar y recuperar de forma casi milagrosa esta entretenida historia de humor en la reconquista, otra de las maravillas del genio de Jan. Y en sus primeros 500 ejemplares con lámina firmada.

Pero no solo eso, claro, muchas otras cosas más, como la puesta de largo misteriosa de Anabel Colazo en Encuentros cercanos, o de Estamos todas bien de Ana Penyas, el homenaje a Bruguera en una historia llena de humor absurdo e intrigas de espías que es el Solar de Alfons López. Otro caramelito de Juan Berrio en Te quiero, la conclusión de la maravilla psicodélica de No Option! de Pep. El recopilatorio del inteligente humor de Cuttlas de Calpurnio, o el Makinavaja imperecedero de Ivà. O la recuperación de Siete Vidas del influyente Beà. Mucho tebeo bueno y muy variado hecho por aquí donde elegir.

# Europa


  1. Arsène Schrauwen de Olivier Schrauwen. Tomo final y edición integral de esta maravilla de amor y colonialismo que se ha convertido ya en uno de los tebeos más influyentes de este siglo. Ahí es nada.

  2. Philemon de Fred. Un clásico entre los clásicos, una maravilla de la imaginación, que ya nos maravilló el año pasado y que este año ha concluido en su edición integral.

  3. Los Cuadernos de Esther de Riad Sattouf. Lo sigue petando con su análisis de la sociedad, su visión de antropólogo con el humor que se desprende de forma natural de la observación, ya sea con sus memorias en la Siria de Assad del Árabe del Futuro, como en esta nueva serie donde relata las experiencias diarias de una niña en la Francia de hoy.

  4. Un Noruego en el Camino de Santiago de Jason. Muy fan siempre del minimalismo del noruego, en este caso en una obra más autobiográfica relatando su experiencia en el camino de Santiago.

  5. De tripas corazón de Pozla. La experiencia en primera persona del autor sobre la enfermedad de Crohn y como ha marcado su vida, con un dibujo que transmite tantas sensaciones, y consigue expresar el dolor de forma gráfica.

  6. Baking with Kafka de Tom Gauld. Muy fan del escocés, mucho, ya lo fuimos de Mooncop, este año traducido aquí, este año del segundo recopilatorio de sus muy ingeniosas tiras literarias, el año que viene traducidas aquí.

  7. El malvado zorro feroz de Benjamin Renner. Humor mucho humor para todas las edades en esta historia de un zorro con un fondo de buen corazón y problemas para alimentarse siguiendo su instinto. Una pequeña maravilla premiada en Angoulême y con adaptación animada.

  8. El problema de las mujeres de Jacky Fleming. Sarcasmo inteligente directo a la yugular para reivindicar el olvidado papel de las mujeres en la historia ante el menosprecio de años de machocentrismo.

  9. Las cien noches de Hero de Isabel Greenberg. Un dibujo muy personal para continuar construyendo las leyendas de un fantástico universo propio, dando la vuelta a los mitos occidentales, en está ocasión con una versión particular de los cuentos de mil y una noche.

  10. La levedad de Catherine Meurisse. El relato del trauma de los atentados de Charlie Hebdo y como superarlo a través de la búsqueda de la belleza. No tan visceral como Luz pero igualmente contundente.
Pero hay más cosas, siempre hay más cosas, como el instructivo Valerosas de Pénélope Bagieu, el bonito Vincent de Barbara Stok, el costumbrismo surrealista de Freezer de Veronica Carratello. el histórico ¡Maldito Allende! de Olivier Bras y Jorge González, el fabuloso Hasib y las serpientes de David B. Y Spirou de Tome y Janry o en su versión libre, La mascarada de Tehem, Makyo y Toldac.

# Americano y el mundo


  1. El arte de Charlie Chan Hock Chye de Sonny Liew. Como relatar la historia de Singapur usando la vida de un dibujante de cómics con la que juega con múltiples estilos y transmite el amor por el medio.

  2. Crawl Space de Jesse Jacobs. O como disfrutar de las habituales filigranas gráficas del americano, esta vez en multicolor mientras nos explica una historia de universos paralelos dentro de lavadoras. Sense of wonder.

  3. Fire!!! de Peter Bagge. Una nueva biografía de Bagge, en esta ocasión de una mujer negra, escritora y antropologa en los Estados Unidos de los años 20. COn todo en contra buscó y triunfo en buscar su propio camino.

  4. Piruetas de Tillie Walden. Cantidad de talento destila con apenas 22 años, hace un tocho de 400 págs. donde relata su experiencia con el patinaje artístico a nivel profesional y su despertar sexual. Mucha madera que promete cosas muy buenas.

  5. Sadbøi de Berliac. Un autor argentino que vive en Europa (entre Noruega y Berlin) y que hace un manga gekiga, cómic global. Y cómic incómodo, de aquellos que no deja a nadie indiferente, o gusta o no, y creando cierta polémica en unos planteamientos sobre los límites del arte y los dilemas morales de Occidente sobre la inmigración y los refugiados.
Y alguna cosilla más como el Blammo #9 de Noah Van Sciver, un indie americano que recupera el sabor y formato de las revistas indies de los 90. Y poco más, si no te metes en el tema superhéroes y el mainstream, donde hay cosas interesantes pero no se puede con todo, la verdad que lo que llega de otros lares es más limitado.

# Manga


  1. La mujer de al lado de Yoshiharu Tsuge. Más historias de este genial autor clásico, con ese tono lúgubre y pesimista para reflejar la parte más negra de una sociedad de posguerra, con mucho de autobiográfico.
  2. Yotsuba! 13 de Kiyohiko Azuma. Un nuevo tomo de la niña de las trenzas verdes es siempre una alegría. Como consigue transmitir Azuma la inocencia y la alegría de vivir y descubrir siempre cosas nuevas en lo cotidiano, una delicia.
  3. Golden Kamuy de Satoru Noda. Una serie seinen que tiene mucho de formula shonen, con búsqueda del tesoro, personajes yuxtapuestos, malos muy malos. Pero con un retrato de los Ainu del norte que atrapa.
  4. Parasyte de Hitoshi Iwaaki. Un clásico muy noventero, con un dibujo claro y muy funcional, pero con una historia de invasión alienígena que atrapa y unas escenas de lucha desgarradas.
  5. Kitaro de Shigeru Mizuki. Y otro clásico entre los clásicos, las historias de fantasmas de Mizuki, recuperando e reinterpretando el folklore japonés para crear unas historias de terror para todos los públicos.
Y al contrario que con lo americano, con el manga si que hay muchas cosas, muchas más como las postales de Venezia de Jiro Taniguchi. El final de Billy Bat de Naoki Urasawa, mejor cerrado de lo que esperábamos tras lo enrevesado de la trama. También el final de I am hero de Kengo Hanazawa, excelente historia de zombies. Y muchas más cosas que no he podido leer, no me da la vida para todo.

Y con esto se resume mi año de lecturas tebeíles. Un 2017 que ha dado bastante de sí. El año que viene seguiremos leyendo dentro de nuestras posibilidades, y seguro caen buenas lecturas, algunas ya anunciadas.

21 diciembre 2017

Otro más, este siglo corre demasiado


Otra vez al cabo del año, de nuevo pasan tantas cosas que a penas podemos recordar los hechos destacables, las redes están alterando la percepción temporal de todo…

Pero aún así aquí estamos para frenar un poco, y tranquilamente mantener nuestra tradición de desear a todos

UNAS FELICES FIESTAS Y MUY PRÓSPERO 2018 

Así, usando un modo tradicional, no sea que con los tiempos retrógrados que vivimos alguien se sienta ofendido, y aún así los habrá. Tiempos raros, tiempos de muchos cambios que pueden asustarnos a muchos, y que unos pocos usan para mantener lo máximo posible sus privilegios, a costa de lo que sea.

Difícil ser optimista, cuando si haces aquello que de pequeño te enseñaban era la máxima expresión de la voluntad popular ahora recibes palos por hacerlo. Una farsa de políticos y los de siempre recibiendo. Y otra navidad que por estás tierras viene alterada por la actualidad política.

Así que este año toca votar. Votar de nuevo y teniendo muy en cuenta quién es el que decide usar la violencia, el recurso de los incompetentes (Asimov dixit), ante una gente dispuesta a manifestar pacíficamente su opinión. Luego veremos si nos toca la lotería, a ver si el Barça aumenta la diferencia con el Madrid, unos turrones y si nos hemos portado bien a ver que nos trae Papá Noel, que por suerte va de rojo y no de amarillo.

Y esto solo en unos días y antes de que se acabe el año. Para no estresarse.

En fin, difícil no ponerse político y local. Tampoco es que en global nos den buenas noticias, con un calentamiento global que no parece preocupar mucho y que ya nos está cambiando la vida.

Nada, son momentos para rodearse de la familia, coger fuerzas, cuidarse de la salud. Y adelante.

Pase lo que pase, siempre para adelante, y que no nos quiten la alegría de seguir el camino. Y si es en buena compañía mucho mejor.

PD. Un cacahuete para el que identifique el qué y dónde de la foto.

20 diciembre 2017

Akira, 35 años

1982. Diciembre de 1982. Por aquí se daba más o menos por acabada la transición tras plocamarse presidente del gobierno Felipe González, la gente bailaba el Tainted Love de Soft Cell, todavía resonaba la victoria de Italia en el Mundial de España pero la gente prefiere recordar el juego desarrollado por Brasil, y olvidar el papel de la selección nacional de Santamaría. Las calles estaban llenas de Seat 127, Talbot Horizon pero el que lo petaba era el nuevo Renault 9. Se había estrenado Blade Runner, faltaba todavía unos meses para que Bruce Bethke usase la palabra Cyberpunk para titular un relato, y dos años para que William Gibson publicase Neuromante. 1982. Yo andaba feliz con mi camiseta de Naranjito, quizás los primeros Mortadelos caían en mis manos de proto-lector, y muy lejos me quedaban la segunda edición del Salón del Cómic de Barcelona o toda la eclosión del cómic adulto y las revistas de aquella época, aquellos Víboras post intento de golpe y tal, las batallitas entre linea clara y linea sucia. 1982. Los ochenta.

Y mientras tanto, en el otro lado del mundo, el 20 de diciembre de 1982 aparecía en la Young Magazine de Kodansha una portada con un adolescente enfadado. Y dentro 26 páginas del primer capítulo de Akira, de Katsuhiro Otomo. Y entonces cambió todo. Prácticamente de forma continuada y con un éxito importante fue apareciendo el manga serializado en esa revista hasta su pausa en 1987. Pausa para hacer la adaptación al anime de 1988 aún sin tener el final perfilado para el manga. Un hito de la animación. Y en junio de 1990 daría por finalizado el manga, tras 8 años de publicación y 17 años de mankaka profesional de Otomo.

El manga y luego el anime rompieron muchas barreras, y fueron el punto de inflexión de la llegada de los tebeos japoneses a Occidente. En el salón del Cómic de 1990, todavía se celebraba en las Drassanes, yo ya era un lector de cómics aficionado, y esa una cita ineludible, y allí en el stand de Ediciones B vi seis números de un cómic que me llamó la atención de forma especial, seis números de golpe era poco viable para mi joven economía, así que lo que más que me pude llevar fue el folleto de suscripción. Y el único cómic al que he estado suscrito durante un año, no más porque correos tardaba en entregar los números y verlos en los kioscos me comía las ansias.  Y llego justo con la edad que tenía que llegar, y me voló la cabeza para siempre. Le voló la cabeza a toda una generación. Y rompió la barrera cultural que tenía Japón con el resto del mundo, luego llegarían cosas como Dragon Ball que harían la autopista. Pero antes ya estaba Akira abriendo el paso.

Desde entonces la obra de Katsuhiro Otomo se ha convertido en una de las obras más influyentes en la cultura popular en Oriente y en Occidente. Tanto el manga como el anime significaron la punta de lanza de la invasión de la cultura popular en Occidente, siendo declarada como una clara influencia desde entonces por muchos autores de cómic, música, cine… No deja de haber referencias por doquier, cuantos autores declaran su influencia. Y nunca deja de haber rumores sobre su película con actores. Y nuevas ediciones y rendiciones, la última anunciada la nueva de Norma en sentido oriental de lectura y blanco y negro, y se nos vuelve a hacer la boca agua a pesar de que ya tenemos en casa tres ediciones diferentes. Y es que es un tebeo que no me canso de leer y releer nunca, y que cada cierto tiempo me surge la imperiosa necesidad de repasar, tan lleno de cosas como está. Y sin embargo algo me falta, todavía no hay esa obra de ensayo de referencia sobre un cómic tan importante como este, algo a lo que habría que poner remedio. Un tebeo que fue cyberpunk antes del cyberpunk, que mantiene su frescura a pesar de tener ya 35 años, y sus diseños y su narración todo sigue pareciendo moderno.

Una obra magna, clave para entender la evolución no solo del medio sino de la cultura en general. Y que todavía no cuenta con un buen ensayo que la analice con perspectiva. Una lástima. Pero seguiremos leyéndola y disfrutándola como la primera vez, tantos años y sigue grabada en nuestra cabeza.


19 diciembre 2017

Voces en las sombras

Voces en las sombras. Una historia de las radios clandestinas de Luis Zaragoza. Libro académico que relata la historia de las radios clandestinas, es decir un libro que repasa los conflictos políticos del siglo XX, y hace un buen repaso, en torno al uso propagandístico y de movilización de las radios que emiten de forma ilegal, contra un régimen o otro. Muy interesante ver como se utilizaba este medio y la forma de actuación de los diferentes bloques. De nuevo la guerra sucia de la CIA no queda en muy buen lugar, pero no porque el autor sea partidista, los hechos mismos lo son. El libro esta escrito de una forma envidiable, muy clara, que se agradece por la cantidad de información que aporta, fruto de años de investigación. Quizás al ser un libro académico, donde la información y los hechos a veces se presentan directamente, y la falta de alguna anécdota hace su lectura un poco ardua. Pero es un interesante repaso al siglo XX desde el punto de vista de las radios, pero siempre bien contextualizado.

29 noviembre 2017

Jan, el genio humilde

Jan, el Genio Humilde. El primer libro de los Tebeotextos de la asociación Cultural Tebeosfera, un recopilatorio con textos de Javier Alcázar, Manuel Barrero, Jordi Canyissà, Carlos De Gregorio, Froilán Escobar, Daniel Fernández, David Fraile, Antoni Guiral, Roberto Hernández, Antonio Martín, Javier Mesón, Alfons Moliné, Juan Padrón, Álvaro Pons y Quim Zafra. Y una entrevista a Jan, además de bastante material gráfico incluyendo una buena muestra del trabajo de este en su etapa cubana, una etapa más desconocida pero muy interesante para conocer las bases creativas de Jan, del que somos lectores empedernidos desde que empezamos prácticamente a leer con su Superlópez. El libro recorre prácticamente toda la trayectoria creativa del autor, desde su estancia en Cuba, hasta sus trabajos al regreso, dando cuenta de lo versátil de este autor , lo que cuesta triunfar en una industria que no lo es tanto, y como ha sabido no renunciar nunca a sus principios. Y que hay mucho Jan más allá de Superlópez. Leyendo el libro uno tiene ganas de que se recuperen y reediten mucho de sus trabajos menos conocidos.

28 noviembre 2017

El archivo de atrocidades

El archivo de atrocidades de Charles Stross. Primera entrega de los Archivos de la Lavandería, un techno-thriller o algo parecido, sobre funcionarios encargados de un secreto departamento del estado británico al cargo de lidiar con las amenazas demoníacas y de universos paralelos y el uso de la magia. El protagonista es un encargado informático, con alma de hacker que le hará meterse en más de un problema y convertirse en un agente activo de la Lavandería, para enfrentarse a una amenaza demoníaca invocada por un cruce de terroristas islámicos y nazis exiliados en la segunda guerra mundial. Y es que en este universo la magia tiene unas profundas raíces matemáticas, con la que hay que controlar a científicos, informáticos que pueden dar por casualidad con teoremas peligrosos. Mucha aventura, un toque de humor a lo burocracia inglesa, y unos cuantos seres a lo Lovecraft en esta serie de Charles Stross que se presenta con dos aventuras en este tomo de Insólita. Todo un subgénero ya el de las estructuras estatales a las sombras, desde los Hombres de Negro, los Proyectos Manhattan o tantas otras a las que se suma esta Lavandería de Stross, que está entretenida para pasar el rato.

10 noviembre 2017

1 de octubre

Mira hijo, ya han pasado más de un mes así que ya se ha convertido en batallita y vamos a explicar el tema tal como nos ha pasado, antes de que la memoria nos traicione más, y a pesar que las consecuencias de la cosa todavía van para largo y no parecen tener fin.

Qué pasó el 1 de octubre de 2017? Bueno era un domingo que amaneció lluvioso, en Catalunya los ánimos llevaban ya unos días/semanas/meses/años caldeados, así que ese día la población catalana estaba llamada a participar en un referéndum para saber si queríamos que Catalunya fuese una república democrática independiente o no. Para unos era la culminación de un proceso, del Procés, que más o menos desde el 2011 o 2012 (depende como lo veas) lleva mareando la perdiz en la política catalana. Para otros era un acto ilegal provocativo que iba a tener consecuencias (y tela). Y para otros era un acto reivindicativo contra esas amenazas represivas. Fuese lo que fuese, la cosa es que había que ir a votar, porque cuando nos ponen unas urnas y nos preguntan está muy feo no ir a votar y expresar tu opinión democráticamente, que pocas oportunidades se tienen para ello como para hacerle un feo a una.

Desde que en el parlamento la liaron con unas leyes declaradas a la torera para el referéndum y el posible traspaso a la república, que rápidamente el gobierno del PP hizo declarar inconstitucional, prohibir y empezar a negar que iba a pasar, se monto una buena en Catalunya, se llenó de Guardia civiles y Policías nacionales, buscando papeletas por todas las imprentas, y sin oler ni una urna. Mientras los comandos independentistas bien descentralizados y organizados iban distribuyendo unas urnas de plástico compradas en China y traídas desde Francia por todo el país. El gobierno del PP detenía a unos cuantos cargos políticos para caldear más el tema, montar más manifestaciones rollo ginkana (una cosa que ha demostrado el procesismo es que Catalunya es un país imbatible montando performances multitudinarias). En fin que nadie sabía si se iba a votar o no, o que coño iba a pasar.

Y llega el fin de semana de la votación, y visto lo encabronados que están las fuerzas policiales estatales se supone son capaces de cerrar todos los colegios electorales. Para evitarlo se organizan festivales en todos los locales para ocuparlos las 24h, y vaya que se ocupan. Porque una cosa es el circo que montan los políticos, y otra cosa que les sobrepasa es como se ha movilizado la población en este caso, y de forma muy transversal, así que la gente iba a defender su derecho a participar, y ese derecho a voto iba mucho más a allá de la independencia o no. Es decir, el astuto gobierno consiguió transformar un tema identitario, en un independentismo más grave y finalmente en una amenaza a las bases de la democracia. Como para que la gente no se movilizase por narices.

Así andaban los colegios ocupados y protegidos por la gente corriente, los vecinos, las tietas...  en eso que nos enseñaron las urnas para picar más al gobierno, y preocupar al CNI que fue incapaz de olerse la jugada. Y el siguiente golpe de efecto fue el mismo domingo por la mañana cuando anunciaron el censo universal, golpe maestro, si se cerraba un punto de votación la gente podía ir a otro sin problemas. Pensar que la tecnología permite hacer cosas que por costumbre no se hacen, algo tan sencillo como demoledor. Todo esto debió cabrear bastante a los que mandan y tenían el encargo de que ese referéndum no pasase.

El domingo por la mañana nos levantamos pronto, inevitable, hijos míos, porque raro es el día que aguantéis en la cama un fin de semana más allá de las siete. Y nos dispusimos a ir a votar pronto, porque quieras que no algo de follón se esperaba. Así que nos camuflamos para ir a tirar la basura, cogimos la sudareda con capucha que estaba nublado, y allí que nos fuimos, como un domingo electoral cualquiera. Lo que pasó a continuación te sorprenderá.

Llegamos al cole de siempre, y ya había la leche de gente, de hecho una cola serpenteaba por la acera y no se sabía donde empezaba o acababa, así que mismamente nos colamos por en medio y la gente amable nos permitía añadirnos al gentío, el ambiente ya te digo no era el de unas elecciones normales, la gente estaba animada y contenta de poder dar ese paso. Porque independencia o no, lo que la gente quiere es ventilar el tema de una vez por todas.  Pero los problemas aparecieron en seguida, había problemas de conexión, los esperábamos el gobierno no se iba a cruzar de brazos sin intentar atacar las redes. Había tensión por ver como iba a actuar la policía, y la aparición de la patrulla de Mossos subió los nervios.

Pero luego empezamos a recibir noticias por los móviles y la tensión creció, ya no había sonrisas y si mucha indignación. Ver imágenes de las cargas desproporcionadas de la policía reventando colegios, disparando bolas de goma por las calles de Barcelona, y ver como el cole de mis hijos, a solo unas manzanas, estaba siendo desalojado a lo bestia, con un uso de la fuerza desmesurado, sin motivos, y rompiendo las puertas. Eso te cambia el humor, y ya te pone de una mala leche y una tensión, que vamos. Sobretodo porque cuando te enteras que el instituto de dos manzanas más arriba también ha recibido, los números para que te toque recibir suben, pero nada, a hacer piña y esperar el sorteo, porque no nos iban a sacar ni amedrentar fácilmente. Tuvimos suerte, y es una muestra del despropósito de la actuación policial, lo más cerca que estuvimos de recibir fue al paso de seis furgonas llenas de antidisturbios nacionales, que fueron recibidas al con gritos y gestos de desafío. Pero hubo suerte y no pararon, algún otro iba a recibir, pero ya se quedo la cosa en tensión, y allí estábamos todos, la frutera, el vecino, decididos a seguir esperando. Preparados para hacer piña, mientras la red iba y venía, se iba haciendo pasar delante a los abueletes y los que no podían estar de pie, se aplaudía a rabiar cuando alguien salí tras haber podido votar, y las ganas de mear iban en aumento. Pero no nos iban a mover de allí, ya vendrán a sacarnos que yo no me voy sin votar. Y allí estuvimos, en un ambiente festivo de resistencia, tenso y triste a la vez por ver las noticias que iban saliendo de palos por doquier.

Tras cinco horas de cola o así conseguimos entrar, y votar, vaya que si votamos. Me lo hacía encima, vamos que fue validar el dni, votar e irme a echar una meada más que deseada. El voto más épico de mi vida. Y después de votar la cosa era seguir delante del colegio. Por que aquello había que defenderlo todo el día. He de decir que yo no me quede, porque mira tu por donde la vida sigue y teníamos visitas de unos amigos canadienses que venían de Alemania, buenos días para hacer turismo. Pero me dio la oportunidad de pasear por una parte de la ciudad y ver que ambiente se respiraba, no por el centro, fuimos a pasear por la playa, un sitio que no debería tener mucha conflictividad y no era cuestión de exponer a los visitantes. Y muchas colas en los coles, en todos, mucha tensión y organización para resistir, escuchar un poco la radio pero no ver muchas imágenes hasta por la tarde ayudó a mantener la sangre fría, pero la cabeza estaba quieras que no en otro lado. Por la ciudad desde luego el ambiente no era el de domingo normal, mucha menos gente paseando, o estaba en los coles o estaba en sus casas.

Y luego vino lo que vino, después de la lección democrática de la gente, una lección mayúscula, épica. Ante la indignante actuación estatal, otra muestra más de mediocridad mezquindad y maldad a la que nos tienen ya lamentablemente acostumbrados. Había que celebrar que en esas condiciones más de dos millones de personas tuvieron las narices de intentar votar y conseguirlo. Unas condiciones que dan para una participación de un 40 y pico por ciento y un 90% de síes. No es que fuese suficiente para una independencia de verdad de la buena, pero desde luego era una lección mayúscula y un punto de inflexión. Para resolver el tema solo se puede hacer una cosa, y es preguntarnos de verdad y bien a todos los que estamos en Catalunya que es lo que queremos. Todo lo demás parece marear la perdiz a mala fe y por intereses que no son los de la gente.

Las hostias que cayeron sin comerlo ni beberlo el 1 de octubre recorrieron todo el mundo dando una imagen lamentable del Estado, muy merecidamente. EL esperpento político de la negación y justificación de tal violencia es una cosa indigna y vergonzante. Tiempos raros en los que vivimos y en los que derrotar una lógica neoliberal es cada vez más necesario y difícil. Mucho se ha escrito y se escribirá sobre el tema, mucho falta por saber y como mandan los que mandan no se sabrá, pero tengo mi opinión y teorías sobre el asunto, y creo que no fue tan improvisado y mal organizado como parece. Se las trae al pairo la opinión internacional, la cuestión era acojonar y amedrentar a largo plazo, saben que la opinión pública en la era de la información es más que volátil, pero las hostias bien dadas ahí quedan.

Lunes día de digestión, y el martes paro general en protesta contra la violencia. En la puerta del colegio de mi hijo claveles y notas dando las gracias, por la mañana las concentraciones del barrio pasaron por los colegios violados, reventados y castigados, flores y cárteles de agradecimiento en las escuelas, abrazos, canciones antiviolencia, como una procesión para que la gente mostrase el apoyo a la gente, los vecinos a los vecinos. Es recordarlo y se te pone la piel de gallina. Y claro en el contexto también hay gritos pro independencia. Un paro, huelga general, mucha unanimidad para parar y protestar. Una de las protestas más grandes que se han visto nunca en estos lares, gentíos en todas las poblaciones, una muestra de repulsa contra la violencia y el abuso estatal. Y es que lo de la policía traía cola, con gritos y expulsiones de hoteles, peleas por poblaciones donde estaban acuartelados. Y cola que traerá todavía.

Y tras esa victoria pírrica de la democracia, pues vinieron las derrotas esperables de la realidad de un estado mezquino y la mediocridad de los políticos. Pasamos por unas performances simbólicas de pseudo república, algunos se creyeron la ilusión del tema, pero sin planes reales detrás ni fuerza y apostando todo a un más que débil reconocimiento internacional no hay país ni república que pueda surgir. Y ahora toca represión a punta pala, mal para todos. Parte del govern encarcelado, la autonomía intervenida más de lo que ya estaba, las libertades recortadas, la gente desilusionada y más radicalizada en posiciones enfrontadas. Todo un panorama para unas elecciones autonómicas que ya veremos. La estrategia de abogados estatales de dejar que todo caiga bajo el peso de la ley sigue en marcha, una muestra de bajeza política de narices, pero ya les va bien, ellos siguen a tapar sus vergüenzas y sus robos con la bandera. Todo triste y muy raro. Un escenario muy, muy gris.

Vamos que el tema sigue dando y dará para hablar, escribir, debatir, llorar hasta estar bien empachados si no lo estamos ya. Nada bueno en ningún aspecto.

Bueno sí, hay una cosa que está bien. La muestra de fuerza que tiene la gente unida, es acojonante. Es bueno, y de ahí han surgido las CDR, unos comités de defensa de la república, que vienen desde abajo y son bastante transversales, y por tanto algo naïf e inocentes en sus planteamientos, pero es la gente autoorganizandose y eso es bueno, esperemos resistan de verdad y no se dejen manipular por ningún agente político del signo que sea (hay ahí tema de sobra). Pero es un movimiento popular, y falta nos hacen porque si algo hemos aprendido estos días, o nos han recordado a hostias, es que la democracia se hace desde abajo, y no es un tema fácil, la democracia se lucha y se gana día a día, y en este país, sea el que sea, no se puede bajar la guardia ni un segundo, si no queremos ser esquilmados, pisoteados y apaleados por las oligarquías de siempre. Es lo que hay, la democracia se lucha desde abajo, nuca viene dada desde arriba.

Luego está todo el folclore político del proceso y la lucha centralizadora, pero eso son otros temas. Aquí era solo momento de explicar que el 1 de octubre votamos. Y que lo volveremos a hacer, sin duda.