27 agosto 2008

Nápoles

A Nápoles solo fuimos a pasear un día, para ver el centro y tal. Se supone que podría ser más que suficiente, por que según para quién puede ser una ciudad extra estresante. Es otro mundo. Esto es la plaza del ayuntamiento.
Este es el Castel Nuovo, lo acabaron los catalanoaragoneses. Se nota algo la presencia de los catalanes por aquellas tierras.

El café Gambrinus, se supone que es uno de los más antiguo de la ciudad o de lujo, o algo así. Entramos pero justo cuando entraba un grupo gigantesco de turistas chinas, así que a otro lado a por el café... Bueno, yo pasó del café, así que me tiré a los dulce, la sfogliatella, una cosa de pasta de hojaldre rellena de riccotta y semolino, ruiquisimo... Comer no se come mal.

La piazza del Plebiscito, con la iglesia de San Francisco de Paula.

La iglesia más de cerca, es como un pequeño Pantheon.

Es castel dell'ovo O el castillo del huevo que dicen hay debajo, y cuando se rompa, se acabo Nápoles.
Una vista de la costa construida, el barrio de Posillipo, donde viven los ricos... Solo lo vi de lejos, así que no se como es de cerca...

El Vesubio desde Nápoles, algo apagado, pero amenazante.

Las barquitas por el puerto.

Una calle típica del centro antiguo de Nápoles, en el barrio de santa Lucía. Pintoresco de verdad. La verdad es que esta ciudad es de impresiones, pintoresca, choca verlo.
Via Chiaia. Una de las calles comerciales del centro.

Y unas escaleras laterales de la calle de antes. Muy peculiar.

La via Toledo, ellos la conocen como vía Roma, un poco más ancha que las laterales, y una de las cormeciales.
Un palacio del banco di Napoli. Lo destacable es la pose del carabineri.

Una de las calles laterales, pertenecientes al Quartieri Spagnoli, antiguamente donde estaban las tropas españolas.

Otra de las casas del centro. El centro en sí era como el barrio del Raval de Barcelona antes de que llegará todo el pijerío y turismo multiplicado por cien. Dura impresión.

Otra esquina del barrio, con el típico camión parada de verduras, cuando pasan por las calles, las señoras descuelgan unos cubos desde el balcón para hacer la compra.

Obelisco de la Immaculada en la Piazza del Gesú Nuovo.

Y la iglesia del Gesú Nuovo.

Dentro San Francisco xaverio, a punto de levantarse, o algo.

Los exvotos, presentes que deja la gente cuando se ah cumplido la curación. En este caso a san Giuseppe Moscati, de Benevento. Cientos de estas cosas en una capilla lateral.

Una tienda de pasta, en la calle Benedetto Croce.

Otra iglesia por el centro.

En italia, un ciquecento ante un altar, no puede haber estampa más napolitana...

San Gregorio Armeno, donde hay tiendecitas que venden figuritas para los belenes, en navidades intransitable...

La imprescindible pizza napolitana. Pero que rica, rica, por tutatis. Que buena esta la comida en Italia. Todo el caos del centro e Nápoles vale la pena para poder llegar a comerse una de estas pizzas. Y la espera a la puerta también.

Luego, al museo arqueológico de Nápoles. Que siendo agosto, cuando más turistas pueden ir a esos sitios, pues nada mejor que cerrar la mitad de las salas para reformas. Luego se preguntan como es que ha bajado un 80% el turismo en la ciudad, claro que el problema con la basura no fue un gran reclamo internacional.

Allí tienen algunos mosaicos romanos, sobretodo de Erculano y de Pompeia.

Que detalle a base de piedrecitas, cual pixelado antiguo...

Otros son más esquematicos, pero que gran anuncio para una taberna.

O para una pescadería.

Luego hay otros mosaicos, digamos para otro tipo de locales... Y es que en una de las seccionas abiertas era dedicada a una peculiar temática.

Con cosas digamos que incluso de un gusto muy discutible, un fauno haciendole cosillas a un acabra...
O unos personajes con grandes atributos.

O pollas voladoras con campanas colgando. Impresionante. Dicen que eran los timbres de las casas de Pompeia...
Otro relieve explícito.

O un fresco en las paredes. Más claro agua. Estos romanos no parece se lo pasaban mal del todo.

Otra diosa de les mamelles, ahora se entiende un poco más.

Una romana secandose por delante.

Y por detrás...

Piazza Cavour, fuera del museo de nuevo.

Piazza Dante. Un colegio interno.

Via Pignasecca, otra calle típica, del quartieri Montesanto. Motos por todos lados. Había que tener cuidad, por que podían ir en cualquier sentido, por la acera o por la calle, en sentido único por los dos lados, con casco y sin casco, una o hasta tres en la misma moto, parece todo es opcional en Nápoles...

Via Roma, el ejercito en la calle, delante de las casas, para reforzar la presencia policial en toda Italia.
Largo Ecce Homo, una ex iglesia, o algo, en bastante mal estado. Nápoles daba esa sensación, todo en obras de restauración en algunos sitios, ruinas en otro, algunas bien pintadas otras se caen...
El Duomo di Napoli, la catedral. En una calle estrecha, algo menos que las otroas, pero escondido, para la plaza de la catedral que se espera comúnmente.

El interior del duomo. Se ve que hay una reliquia de San Gennaro, el patrón, y el 19 de septiembre se licua la sangre del santo...

Y con esto más o menos ya gastamos el día en Nápoles. Tanto callejón, callejuela, motos por aquí y por allá era bastante para un día...

1 comentario:

Marta dijo...

a ver, no me ha quedado claro... la gente reza dentro del coche o es la manera de amenazar al que se lo mira desde la cruz "como no cumplas lo que te pido, te atropello"??? x-DDD