03 julio 2013

Espías como nosotros

Cuando empezó el siglo XXI todos nos preguntamos jocosamente donde estaban los coches voladores y las colonias espaciales, donde estaba el futuro que habíamos leído en los libros de ciencia ficción, visto en las películas y que tanto nos habían vendido. Han pasado unos cuantos años ya de este siglo, y han ido cayendo torres, cayendo bancos, y nos hemos ido dando cuenta que si que estamos en el futuro, dentro de él bien metidos, hasta el cuello. Pero es que quizás no pensábamos en la ciencia ficción adecuada, estamos en un presente totalmente cyberpunk, a lo John Brunner, William Gibson o Neal Stephenson. Ahí estamos, del todo metidos, y si no que se lo cuenten al espía que desenmascaró a los espías, la historia de Snowden, huyendo por el mundo, sin lugar donde caer y perseguido por la malvada NSA es una historia cyberpunk que ya quisiera más de uno haber escrito.

Y todo por desvelar que nos espían, que el gobierno de los USA lo mira todo. Cosa que ya se suponía. somos esclavos de las redes, hemos vendido nuestra privacidad muy barata, o quizás es que en este futuro la privacidad no importa, ya no es lo que era. La gente se geolocaliza, se sigue y se comunica usando servicios a los que cede miles de derechos sin leérselos. Y todo pensando que total, para lo que pueden saber de mi, que más da. Pero es que la información individual al fin y al cabo si que interesa un pimiento, lo que interesa es tener esa información de miles de personas, que permitan analizar las redes, las interconexiones, los patrones, eso si que da información, mucha. Y eso es lo que persigue la NSA. No escuchamos tus conversaciones, pero tenemos todos los patrones de conectividad, como se detecte alguna anomalía en la red, la has cagado.

Y llevamos toda esta información continuamente en los bolsillos, en unos aparatos móviles que son cientos de veces más potentes que los ordenadores que se usaron para poner el hombre en la luna. Móviles capaces de calcular trayectorias espaciales. Pero seguramente se puede contar con los dedos de una mano la gente que sería capaz de coger su móvil y hacerlo capaz de diseñar y controlar un vuelo lunar. Quizás sea eso, estamos tecnológicamente superados. Anda que no es cyberpunk el tema. Y como va un gobierno a dejar la ocasión de aprovecharse de ello para generar control. Imposible, y controlar muchos datos es el sueño de cualquier gobierno, no es la psicohistoria de Asimov, pero se le acerca. No estamos en el futuro de las colonias espaciales, estamos en uno más cercano, el de las distopías tecnologicas del cyberpunk. Acojonante.

La última de estas historias es que los USA también espiaban a los Europeos. Uy, que sorpresa, vaya, no me jodas hombre. Quiero creer que algunos ya lo sabían, simplemente que ahora vuelve a ser noticia de portada. Porque de sobras es conocido que Bruselas debe ser una de las ciudades con más espías por metro cuadrado. Todas las decisiones que se toman, todos los grupos de lobbistas intentado influir en las decisiones. Y las posibilidades tecnológicas que permiten espiar prácticamente a distancia, igual que los drones hacen guerras a distancia. Como no iban a espiarnos, si las guerras del siglo XXI son económicas (y cuando no lo han sido?). Cuanta falsa indignación que parece que los europeos nos hayamos caído del guindo. Como si los USA nunca hubiesen mostrado que lo que les mueve son exclusivamente sus propios intereses. Es que espían a aliados, si claro, como no hay movidas comerciales entre países, super aliados, super amigos, como Boeing y Airbus.

Bueno, aprovechen, les voy a dar una idea para una buena película, o serie de televisión, o libro, lo que quieran. Supongan que es de sobras conocido el interés por los asuntos delicados que se tratan en Bruselas y que afectan a todos los europeos y las interacciones entre sus miembros. Teniendo en cuenta esto, y de forma secreta, los gobiernos de los paises de la Unión se ponen de acuerda y en los tratados se pone en marcha una agencia secreta encargada de las medidas de seguridad y contraespionaje de los organismos de la Unión Europea. Esta organización se encarga solo de contramedidas, y tiene la obligación de informar de forma directa e equitativa a todos los gobiernos con los datos que descubran. La organización cuenta con miembros de todos los países enviados por las agencias de inteligencia de cada país, expertos en medidas informáticas, que controlan todas las redes e informan de las distintas fugas. Hasta aquí tenemos la base de la película, ahora imaginen un agente de esa agencia, y sus interacciones diarias. Seguro que no se imaginan una peli de James Bond, o de Bourne, nada de acciones espectaculares, ni eficiencia, ni nada. Seguro les ha venido más a la cabeza una comedia de situación, de enredos llena de tópicos nacionales, más del rollo IT Crowd. Eso es Europa, y nos sorprendemos de como van las cosas?

2 comentarios:

Bororo dijo...

brillante...

Me es imposible encontrar una frase en la que no este de acuerdo...

Y el final.. bueno eso ya es buenisimo

Marta dijo...

La reacció de sorpresa dels europeus a l'espionatge americà és un calc de l'escena de Casablanca "aquí se juega!" de l'amic Louis