11 junio 2007

Ikeando (parte uno)

Como más de uno ya sabe o puede haber deducido, me he mudado, he abandonado mi zulo anterior para vivir en el centro de Jena, más cerca de toda la vida, las tiendas, etc, de hecho estoy más lejos del trabajo pero tardo menos en llegar, eso sí, en bus...pero que gran diferencia el tener que ir a comprar a el pasar a comprar...

Ahora tengo una habitación en un piso compartido...otro día ya daré más detalles, o no. Hoy nos centraremos en el paso obvio que todo habitante de una ciudad más o menos grande del mundo occidental debe hacer, o no debe, pero inevitablemente en algún momento todos caemos...Y es que al mudarse a una habitación vacía lo primero que hay que hacer es indudablemente ikearla...

Así que sabiendo que la habitación estaba pelada de todo, había que plantearse el llenarla al menos con lo indispensable, cosa en si misma nada trivial, como todo el mundo sabe, y el que no haya hablado de muebles nunca...antes o temprano todos caemos, y quién te ha visto y quién te ve...

Bueno, pues la solución para solventar ese vacío es ikear la habitación. Como no, en este siglo, vamos a lo globalizado, todo el mundo por aquí tiene la misma mesita de Ikea, pero eh, es que solo son 10 euros...eso sí, la calidad acorde al precio...Pero quién quiere más para una cosa que solo debe soportar un plato, de 1 euro de Ikea...

El proceso de ikear una habitación aunque conocido por muchos no es trivial del todo. Sobretodo si vives en un país en que les da por hablar en extranjero a todos, y el centro más cercano esta como a una hora en coche, y obviamente no tienes coche. Que ciertamente se puede ir en transporte público, pero para abaratar costes Ikea localiza sus centros en las afueras, y el periplo puede ser, cosa de trenes, autobuses, tranvías...

Antes de ir, hay que estudiar bien la primera parida de Ikea, el catálogo, ese pedazo de publicación que reciben las casas que ha superado el concepto de publicidad para convertirse en uno de esas publicaciones como las páginas amarillas o la guía qdq, no sabes cuando, pero hay que tenerlo solo por si acaso. Se puede pensar que los diseños Ikea están diseñados para ser sencillos y ayudar a la gente. Nada más lejos de la realidad, en Ikea esta todo diseñado para que Ingvar Kamprad se siga forrando más de lo que ya lo esta...

Así pues el catálogo es como una revista de decoración, donde se pueden localizar sus productos, bueno más o menos, entre bonitas fotos y tal, la cuestión es que yo echo en falta una sección resumen con las tablas de todos los productos y precios, pero bueno, cosas del diseño, y ya puestos llenarla de bellezas no estaría de más :-). Así que como es poco sencillo en si mismo, el reto es usarlo en alemán, así pillas vocabulario sobre mobiliario...Bueno, la cuestión es que a base de catálogo se han de localizar las cosas necesarias que sean más baratas, y más o menos ajustar el presupuesto. Por que todos sabemos que Ikea es barato, cosa que en realidad es mentira. En ikea lo barato es barato, y tienen cosas baratas. Pero como en cualquier centro comercial, como quieras un poco más de lo que es barato porque es barato, entonces ya no es nada barato...y eso que gana el señor Kamprad...

Para empezar hacemos la lista de mínimos con el catálogo, escogiendo siempre lo más barato de lo barato...es lo que tiene que tu vida en este lugar tenga algo así como fecha de caducidad, aunque luego nadie sabe que es lo que puede pasar, y no hay nada más eterno que lo provisional...Aún así escogiendo lo más barato se trata de renunciar a la comodidad. Para completar la búsqueda nada mejor que pasarse por la página web, en alemán claro, no vamos a hacerlo fácil...Ahí puedes comprobar pesos, precios, y perderte de nuevo, porque el diseño de nuevo es Ikea, que parezca fácil pero no lo sea, la cuestión es enredar al cliente...Curiosidad, si te pones a comprobar las diferencias entre distintos Ikeas de distintos países, verás que los productos son los mismos, pero los precios no, algunos más caros otros más baratos según el sitio...que ya tiene su que la cosa, pero claro, no será lo mismo llevar un mueble chino a un sitio o a otro, o si vendes más mantas en Alemania que en España, cóbralas más caras donde más vendas, la cuestión es que el señor Kamprad no pierda dinero...

Continuará...

(semana temática vamos a tener, a ver quién se atreve con los tochos...)

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Bienvenido a la república independiente de tu casa. Ah, lo siento, odio el rollo Ikea. Eso de tener que ir por los pasillos que te marcan en plan pavloviano me pone nervioso (además del gentío, claro, que no te deja mover). Grrr...

Cristina dijo...

Si no tienes coche, y en el piso no hay nada...¿cómo llevarás los trastos-muebles? porque las cajas pueden ser grandes y pesadas, y no creo que en el bus te dejen subir...

Anónimo dijo...

Aquí te traen la compra a casa,pagando claro, pregúntalo a ver que te dicen. I suerte porque sabes que vas a comprar pero no lo que comprarás al final, al grano que te arruinas

Replicant dijo...

QUe te sea leve la ikerización (no confundir con Iker Jimenez y Cuarto Milenio)...por experiencia, un consell: procura estar còmode i tenir alguna cosa amb una mica de qualitat...és important sentir-se una mica bé allí on un viu

Anónimo dijo...

Siemrpe queremos mas..

y yo quiero m,as..

fascinado..
pues nunca lo he tenido que hacer
un mundo nuevo se abra ante mi...

Marta dijo...

Madrecita, q encuentre un piso amueblado en este pueblo...
...aunque por si las moscas, tomaremos nota ;)