Barça-Recreativo

El aficionado proletario tiene que conformarse con lo que le toca. Y disfrutar con ello. Aprovechando que es semana santa y el campo iba a estar más vacío que de costumbre, más teniendo en cuenta que amenazaba lluvia y el viento soplaba fresco, nos costó poco animarnos para acabar subiendo al campo a ver otro partido del Barça en vivo. Una temporada increible, el partidazo del jueves contra el Bayern y no tener otra cosa mejor que hacer, nos hizo aporvechar la opción de entrar a un precio asequible (que no económico).

 
El Recreativo de Huelva no es ni el más duro rival, ni por asomo, y el Barça estaba de resaca futbolera, y pensando en rematar faenas a estas alturas de la temporada, como para verles en su máxima intensidad. Y si además en 45 segundos marcan el primero y ya tienen solventado el partido, pues a verlas venir, a jugar con el equipo B y a media velocidad. Que lo que toca es conservar.

El árbitro no estuvo fino, ni para allí, ni para aquí. Lo justo para que unos se quejen de ventajismo, y los otros ni les vaya ni les venga, gracias a solventar el partido a su forma. Y aunque falto de intensidad, este equipo es disfrutable en esos destellos de genialidad, de fútbol total, que ya sin querer les salen esta temporada. Iniesta mediante, genial como de costumbre. Y el resto haciendo ese fútbol de pase veloz y presión arriba. Todo a menos velocidad que lo habitual, pero la justa y necesaria para ganar uno de esos partidos que dan ligas.

Por baja intensidad hasta Messi le dió por fallar un penalty. Peor aún así estuvimos más que entretenidos, el partido tuvo golitos, goles anulados, penalties, jugadas de babero, y en el campo ola, como viene siendo habitual esta temporada. Full entertainment, no se puede pedir má, el fútbol es fútbol.