30 octubre 2011

El ilusionista

Parece que llegado el otoño apetece ir más al cine, y la siguiente ha sido el Ilusionista, una película de animación de Sylvain Chomet basada en un guión de Jacques Tati. Una pequeña delicia, con un dibujo cuidado, un toque que ya no se ve habitualmente en la animación americana o japonesa, esta es otra cosa. Como la historia, en principio para todos los públicos, peor con ese toque de Tati, luminoso, con toques de humor, pero también de amargor y nostalgia. En imagen real es un guión que no habría funcionada, es una historia de otra época, pero en dibujos todavía tiene un tono que funciona, nostálgico pero eficiente, aunque hay algún gag cómico que no acaba de funcionar tanto en animado como en las antiguas pelis de Tati. Y es que el homenaje es claro y continuo, es Tati animado, el espíritu está ahí, y solo por recordarlo vale la pena.

3 comentarios:

Anna dijo...

Per mi, una perleta. I un bonic passeig per Edimburg. És maco que t'expliquin una història sense presses...

(i el dibuix és maco maco...)

Marta dijo...

Pel·lícula de sofà, manteta i tè calentó?

Bororo dijo...

LA animación es excelente.. pero la historia.. es Tati, tati... y aquellos guiones ya no me llegan.. aishhh ce la vie...