El domingo fuimos de excursión a ver el castillo de Wartburg. Un castillo medieval declarado monumento de la Unesco desde 1999 y con bastante historia a su espalda.
El castillo tiene su origen medieval entorno al 1067. Con el tiempo se convirtió en el castillo del conde de Thüringia. De esta familia y en este castillo es Santa Elisabeth, que era santa porque fue muy buena y dio de comer a los pobres, o algo así, vamos como todos los santos ni más ni menos, aunque esta ya a los quince años había tenido un hijo...Obviamente el castillo ha sido remozado varias veces durante su historia...
Filigranas dragoniles del pozo.
Por dentro de estas habitaciones alrededor del 1521 se vino Lutero a esconder por aquí, después de liarla bien gorda y conseguir que le excomulgarán. Así que vino a este castillo, que ya conocía porque estudió en el pueblo de al lado, y aquí encerradito se puso a traducir el Nuevo Testamento al alemán. Con lo que consiguió dos cosas, convertir el castillo en una especie de museo y lugar de peregrinación para los protestantes (los católicos ya tenían a su santa Elisabeth) y unificar un poco el alemán como idioma...Aunque claro si uno piensa que en cartas de la época el tipo dice que esta aprendiendo mucho griego, para traducir la Biblia del griego al alemán, uno piensa que muy fiable la traducción no podía ser no, peor no se lo digan por ahí a según quién...
Un mural medieval, con las aventurillas de los señores del castillo en la sala de los caballeros.
Y los mosaicos que cuentan la vida de santa Elisabeth en sus aposentos.
Y una pintura Romántica sobre el mítico concurso de trovadores que parece tuvo lugar en esta sala del castillo. Básicamente se convoco un concurso de canto a ver quién era mejor de todos los poetas, y para ponerlo emocionante, al perdedor se le enviaba al verdugo (ríete tu de operación triunfo). Así todos los trovadores pues más o menos hicieron lo mismo, cantar algo así como el conde, el conde, el conde es cojonudo, como el conde no hay ninguno...Menos uno más chulo que un ocho y que pensó que para pelotas las suyas y se puso a cantar que su conde si que era cojonudo, donde iba a parar...Obviamente el tío se pasó de listo y perdió el concurso, pero cosas de aquella época, se puso a suplicar a la condesa, que bueno, al final consiguió que tras un año y un día se repitiese el concurso...Durante ese tiempo el pobre desgraciado intentó convencer a un famoso mago y poeta llamado Klingsor para que le echase una mano, y este al final cedió para conseguir que nadie perdiese la cabeza por unos versos...Pues vino Wagner por el lugar y pillo esta historia como parte para su ópera Tännhauser
Y es que como por todos lados los Románticos, a parte de románticos, lo que si hicieron es recolectar los mitos del pasado y releerlos para crear una mitología en la que soportar y reforzar los estados nación como entidades propias, que a veces es fácil olvidar lo relativamente recientes que son los conceptos de nación y estado...Así que el castillo durante el siglo XIX fue bastante remozado, y reconstruido a lo que la imagen de los románticos debía ser la edad media. Por ejemplo en esta sala de festejos, muy medieval, pero muy retocada. De hecho vino por aquí Liszt a tocar el piano, y vio la sala con un techo tan plano, y dijo aquí toca tu tía que suena como el culo...así que cogieron y rehicieron el techo de madera para conseguir una acústica más cojonuda...Unos años antes en esta sala se reunieron unos 500 estudiantes de distintas universidades y de distintos sindicatos, para celebrar la reforma y la victoria en la batalla de Leipzig. Estos sindicatos estudiantiles son considerados como la primera muestra e oposición civil democrática, y esa reunión como una de sus primeras muestras democráticas...Curioso esto de los sindicatos corporaciones estudiantiles, por cierto, que una de las importantes era la de Jena, cuya bandera dio lugar a la actual bandera alemana, ya digo eran tiempos de construir identidades nacionales...
Y hablando de símbolos, a partir del de este castillo, hay que decir que el del escudo de Thüringia es el león en el escudo. Y como no recuperado en uno de los tejados.
El castillo, por cierto, esta situado en el extremo norte del Thüringer Wald, así todo rodeado de unos bonitos bosques por los que da gusto pasear para acercarse a la ciudad donde se sitúa el castillo, Eisenach. La ciudad también es muy maja, con un centro muy bonito, con casas museos dedicadas a Wagner, a donde estudió Lutero y donde nación J.S. Bach, y una iglesia curiosa con unos laterales de tres pisos y un órgano que suena bastante bien...Pero de todo esto no hay fotos, que la cámara se quedó fundida de batería...ya saben, si les ha gustado esta historia, pueden contribuir con sus ayudas a la actualización del material fotográfico de este trovador...
El castillo tiene su origen medieval entorno al 1067. Con el tiempo se convirtió en el castillo del conde de Thüringia. De esta familia y en este castillo es Santa Elisabeth, que era santa porque fue muy buena y dio de comer a los pobres, o algo así, vamos como todos los santos ni más ni menos, aunque esta ya a los quince años había tenido un hijo...Obviamente el castillo ha sido remozado varias veces durante su historia...
Filigranas dragoniles del pozo.
Por dentro de estas habitaciones alrededor del 1521 se vino Lutero a esconder por aquí, después de liarla bien gorda y conseguir que le excomulgarán. Así que vino a este castillo, que ya conocía porque estudió en el pueblo de al lado, y aquí encerradito se puso a traducir el Nuevo Testamento al alemán. Con lo que consiguió dos cosas, convertir el castillo en una especie de museo y lugar de peregrinación para los protestantes (los católicos ya tenían a su santa Elisabeth) y unificar un poco el alemán como idioma...Aunque claro si uno piensa que en cartas de la época el tipo dice que esta aprendiendo mucho griego, para traducir la Biblia del griego al alemán, uno piensa que muy fiable la traducción no podía ser no, peor no se lo digan por ahí a según quién...
Un mural medieval, con las aventurillas de los señores del castillo en la sala de los caballeros.
Y los mosaicos que cuentan la vida de santa Elisabeth en sus aposentos.
Y una pintura Romántica sobre el mítico concurso de trovadores que parece tuvo lugar en esta sala del castillo. Básicamente se convoco un concurso de canto a ver quién era mejor de todos los poetas, y para ponerlo emocionante, al perdedor se le enviaba al verdugo (ríete tu de operación triunfo). Así todos los trovadores pues más o menos hicieron lo mismo, cantar algo así como el conde, el conde, el conde es cojonudo, como el conde no hay ninguno...Menos uno más chulo que un ocho y que pensó que para pelotas las suyas y se puso a cantar que su conde si que era cojonudo, donde iba a parar...Obviamente el tío se pasó de listo y perdió el concurso, pero cosas de aquella época, se puso a suplicar a la condesa, que bueno, al final consiguió que tras un año y un día se repitiese el concurso...Durante ese tiempo el pobre desgraciado intentó convencer a un famoso mago y poeta llamado Klingsor para que le echase una mano, y este al final cedió para conseguir que nadie perdiese la cabeza por unos versos...Pues vino Wagner por el lugar y pillo esta historia como parte para su ópera Tännhauser
Y es que como por todos lados los Románticos, a parte de románticos, lo que si hicieron es recolectar los mitos del pasado y releerlos para crear una mitología en la que soportar y reforzar los estados nación como entidades propias, que a veces es fácil olvidar lo relativamente recientes que son los conceptos de nación y estado...Así que el castillo durante el siglo XIX fue bastante remozado, y reconstruido a lo que la imagen de los románticos debía ser la edad media. Por ejemplo en esta sala de festejos, muy medieval, pero muy retocada. De hecho vino por aquí Liszt a tocar el piano, y vio la sala con un techo tan plano, y dijo aquí toca tu tía que suena como el culo...así que cogieron y rehicieron el techo de madera para conseguir una acústica más cojonuda...Unos años antes en esta sala se reunieron unos 500 estudiantes de distintas universidades y de distintos sindicatos, para celebrar la reforma y la victoria en la batalla de Leipzig. Estos sindicatos estudiantiles son considerados como la primera muestra e oposición civil democrática, y esa reunión como una de sus primeras muestras democráticas...Curioso esto de los sindicatos corporaciones estudiantiles, por cierto, que una de las importantes era la de Jena, cuya bandera dio lugar a la actual bandera alemana, ya digo eran tiempos de construir identidades nacionales...
Y hablando de símbolos, a partir del de este castillo, hay que decir que el del escudo de Thüringia es el león en el escudo. Y como no recuperado en uno de los tejados.
El castillo, por cierto, esta situado en el extremo norte del Thüringer Wald, así todo rodeado de unos bonitos bosques por los que da gusto pasear para acercarse a la ciudad donde se sitúa el castillo, Eisenach. La ciudad también es muy maja, con un centro muy bonito, con casas museos dedicadas a Wagner, a donde estudió Lutero y donde nación J.S. Bach, y una iglesia curiosa con unos laterales de tres pisos y un órgano que suena bastante bien...Pero de todo esto no hay fotos, que la cámara se quedó fundida de batería...ya saben, si les ha gustado esta historia, pueden contribuir con sus ayudas a la actualización del material fotográfico de este trovador...
3 comentarios:
Prime!!!!
First!
Eins!!!!... ooder erste o lq ue sea!!!
Mu chulo.. mu chulo.. si señor.. impresionantemenete chulo de lo chulo que es.!!!
Que bonita estancia.
ah y soy yo aunque anonijmjo.. es que nos e que pasa con el password.. me lo habran quitao?
Pos zi, mu cuco se ve todo yep yep. (El texto leido en diagonal, o sea q no opino :$) ;)
Avorridíssim...ja es veu, està avorridíssim a Jena....
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